Muy buena fotografía, los actores geniales, solo un "pero", es un poco lenta

Una película que me lleva a mi infancia, hace que vuelva a vivir el olor a campo, a tierra húmeda cada mañana, a sentir el amor de mis abuelos, a sentirme en casa. Sin embargo, he echado en falta intensidad y puntos de giro. Sin duda, el punto fuerte de esta película es su estética.

Una forma de disfrutar del cine europeo en un espacio universitario muy agradable.

La historia que se narra es la realidad y se desarrolla con toda la naturalidad

Por encima del tema principal me transmitió otras cuestiones, como la falta de comunicación o la sociedad rural, de la comunidad y la brutalidad latente. La película tiene muchas capas por ser un reflejo de un conflicto real y complejo.