Lo queer y el terror siempre han estado entrelazados. Aunque los personajes y las historias queer han sido notoriamente escasos dentro del género de terror (hasta hace poco), las audiencias queer a menudo acuden en masa a las películas de monstruos y slashers debido a la exploración (y obsesión) del género por lo diferente.
Ya sea el cuestionamiento de la humanidad de un villano, los personajes no normativos que no se ajustan a las expectativas sociales o la dramatización de todo, los elementos queer y el subtexto codificado queer siempre han estado ahí.
La idea de presentación de este ciclo de cine es dar a conocer la representación del colectivo LGTBIQ+ en el género más mainstream y popular entre el público, como es el género de terror. En primera instancia se han seleccionado tres películas pertenecientes a distintas décadas con las que se podrá enfocar la evolución de la presencia queer en el fanta-terror.
Sinopsis: Una pareja homosexual se traslada a un pequeño pueblo para disfrutar de una mejor calidad de vida y criar a su hija de 16 años en un entorno sano. Sin embargo, pese a que los vecinos parecen personas bellísimas, Malik comenzará a sospechar que esconden algo oscuro y su mente se romperá en mil pedazos. ¿Estará perdiendo la cordura?