Un desvencijado clásico americano recorre la carretera que lleva a Big Little Town. La noche se cierne sobre esta y The Flamingos Bite se disponen a pasar una temporada en el pueblo.
Podría ser cualquier ciudad del mundo o podría ser Madrid, pudieran ser todas o quizá ninguna, ser todo verdad o simplemente fantasía; pero está claro que el cuarteto ha llegado y quiere contar las historias que aquí suceden. La de aquel que llegó a Big Little Town y no sabía muy bien qué hacía allí, o la de esa mujer que decidió marcharse del parque de caravanas justo antes del amanecer. Al mismo tiempo una pareja se conocía en el centro y decidía recorrer el mundo juntos y se rumoreaba que algunos vieron a cuatro indeseables buscando bronca a altas horas de la noche, mientras en la intimidad de su casa un escritor, delante de un papel en blanco se enfrentaba a sus demonios.
Atrás quedaron las montañas y prometen que ya son mayores para colocarse. The Flamingos Bite solo quiere disfrutar de su estancia en Big Little Town y recorrer sus callejones.