EN LAS ENTRADAS Y EN LA INFORMACION PONIA QUE EMPEZABAN A LAS 19.00 H Y CUADO LLEGAMOS NO NOS DEJARON EMTRAR TUBIMOS IR A DAR UN PASEO PARA HACER TIEMPO HASTA LAS 20.00,NO SE JUEGA CON EL TIEMPO DE LOS DEMAS

Un gran concierto, 100% bailable

Enric no defrauda nunca y sabe rodearse de los músicos que mejor suenan; no faltó el pianista Richard Busiakiewicz que eleva la música del grupo a cotas celestiales. El sonido mejoró tras ajustarlo pasados los primeros temas y ya pudimos disfrutar y bailar sin más límite nuestra pericia y el estado del suelo. El cemento pulido desliza bien si está limpio; si no, es un soporte pegajoso donde bailar se convierte en un ejercicio de control para no lesionarte. Agua, limpiador y cepillo previos a la sesión hubieran hecho una experiencia completa; no es mucho pedir, solo eso, fregar bien para eliminar los restos de las bebidas derramadas la noche anterior y que degradan la capacidad de deslizar del suelo, algo tan necesario para bailar, y para bailar swing.

¡Qué alegría, cuántas risas, qué gusto escuchar a esta banda de jazz! Increíble. El lugar adecuado, pero el personal de seguridad en la entrada muy grosero. Una pena. Elegir la sala y a sus trabajadores también es importante para el resultado final.