El sonido de Joe Wilkes se podría definir como una mezcla del estilo folk intimista británico al más puro estilo Nick Drake entremezclado con los giros más actuales de la Americana. Todo ello ejecutado y arreglado de forma acústica y exquisitamente sobria, sin efectos artificiales y con una calidez especial. La guitarra acústica de Joe Wilkes es sencillamente excepcional.
Islas de Robinson / Luis de Benito:
A Joe Wilkes lo descubrimos hace tiempo ya con su primer e inspiradísimo primer disco de 2006, "Spotlight". Un guitarrista excelente, deudor de maestros como Davey Graham y Bert Jansch, a los que, por cierto ya ha teloneado en el Reino Unido. Y una voz profunda, de esas de las que llegan sinceras y conmueven con naturalidad. Así son sus canciones también; de una profundidad y credibilidad rotundas. Una honestidad en las formas y en la esencia que se refuerza con el sonido natural y directo a más no poder con el que entrega sus canciones.
En su nuevo disco, las canciones de Joe Wilkes vuelven a sonar limpias de efectos, sin trampa ni cartón, como si lo tuvieras cantando a tu lado, en tu misma habitación. Otra joya acústica adornada de vez en cuando por la calidez de vientos y cuerdas exquisitas.
Y además sin tregua; Joe Wilkes canta suave, pero canta sus verdades y aquí tampoco se anda con rodeos innecesarios... Confesional e introspectivo en algunas canciones. En otras, casi en plan "anarquista melódico", retrata y crítica a la perfección la extrañeza y la injusticia que pueblan nuestro día a día...
La belleza como "arma inspiradora"... Joe Wilkes es grande, un náufrago de los nuestros...En pleno "frente" cotidiano...
