Opinião verificadaAssistiu em 4/12/2021
Sorpresa
Yo no conocía a Juana Dolores (tuve conocimiento de ella mediante un boletín cultural del ayuntamiento de BCN) y lo que me llamó la atención como para querer ir a ver su actuación fue una entrevista e Ler mais TV3 y algunas otras informaciones fragmentadas en internet. Ella, como persona, me encanta. Una mujer que destila dignidad, autenticidad, sinceridad y valentía; únicas cualidades capaces de denunciar la hipocresía social insoportable en la que "normalizados, homogeneizados, regularizados, protocolizados, controlados e ideologizados de acuerdo con el poder hegemónico al uso, todos vivenciamos nuestra des-personalizada existencia". Inicialmente pensé que sería una obra de teatro más o menos convencional, pero es obvio que se trata de una performance. El título me parece sensacional, pero después, la obra no lo aprovecha del todo, en mi opinión. Tal y como yo lo entiendo, el mensaje básico sobre los conflictos de poder lingüísticos y los nacionalismos (banderas) queda establecido , así como el drama de la emigración (en este caso con Andalucía como origen), pero la dialéctica proletariado-burguesía, aunque muy presente en lo simbólico, queda menos explícita; quizá porque para la mentalidad actual, los referentes que cita ya no son conocidos en profundidad y con perspectiva histórica por las generaciones jóvenes, mis hijos incluidos. Quiero decir, que las alusiones conceptuales y culturales a las que hace referencia, yo si las conozco porque tengo ya una edad, pero imagino que para la mayoría de los jóvenes, no diré que sean todos desconocidos (excepto, en el mejor de los casos, Rocío Jurado), pero no sé si se logra establecer la tensión dramática necesaria si vitalmente no se conoce la época y las personas aludidas. Lo mismo se podría decir con las alusiones al comunismo (Marx, Stalin, etc). Yo las comprendo cabalmente (y en lo referente a Marx, actualizando su pensamiento, lo vindico), pero me gustaría saber cómo las experimentó el público joven que asistió a la función. Similar creo que ocurriría con Pasolini, al cual yo admiro por su lucidez y valentía. Prevenciones aparte, el carácter transgresor y provocador (como Pasolini), única manera de sacudir las conciencias del "personal-zombi" convencional y normalizado (consumidor, cliente y usuario en todos los órdenes de la existencia) es para mí el aspecto más poderoso de la performance. Me gustaron mucho la interpretación de las canciones y algunos gags como el de Marilyn Monroe y el del "charnego" (para mí el gag más débil es el de las rodilleras "cuatribarradas). La desnudez completa y permenente, estéticamente muy poderosa, me sorprendió mucho. Es encomiable la valentía, la dignidad y el pundonor necesarios como para presentarse así en un escenario a muy poca distancia (por no decir, ninguna) del público. Pero oh! maravilla, con esa naturalidad radical y auténtica que se disfruta contemplando el buen hacer de Juana, pronto quedó como normalizada, hasta lograr integrarla "naturalizada" en el espectáculo, de modo que si al principio era un motivo omnipresente de atención, progresivamente ya no reparabas en ella como algo específico; no diré que pasando desapercibida, pero sí convertida en complicidad y entrañamiento corporal con el público..., en algunos momentos era como si el cuerpo de Juana simbolizara el sacramento de la comunión de las almas de los allí presentes. No obstante, la cuestión de la desnudez sólo me pareció excesiva -en absoluto por mojigatería- justo al final, cuando exhibe el sexo explícitamente en la inmediatez del público de las primeras filas. No me molestó en absoluto, por supesto, pero me pareció sobreactuado e innecesario. Como único reparo de fondo, aunque para mí fue una muy buena y recomendable experiencia, eché de menos un desarrollo un poco más profundo de los mensajes en ciertas partes del espectáculo, porque si bien alude a muchas cuestiones sensibles y actuales (lengua materna y nacionalismos, emigración, feminismo, sexualidad, etc), yo hubiera preferido algo más de desarrollo, como en los ejemplos de Marylin, Pasolini, o la "charnega" (parecía una diosa ibérica pre-romana en toda su majestad). Aunque, quizá, pensándolo bien, una performance es precisamente eso, llamar la atención sobre las incongruencias sociales e individuales, la hipocresía y las injusticias sin arrogarse la misión de proponer soluciones o alternativas, sino sólo de "despertar" conciencias. Enhorabuena, Juana Dolores. Salud y suerte. Que la diosa te sea propicia y te conceda todos tus deseos.
Alberto
5/12/2021
Opinião verificadaAssistiu em 2/12/2021
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Marc Pascual
4/12/2021
Opinião verificadaAssistiu em 17/04/2021
La performer confident!
La Juana es col.loca en un lloc de tal exposició, que de primeres impacta, però quan te n'adones que ha desaparescut és perquè ara sou íntims. Des de l'intimitat pots gaudir amb ella del seu viatge pe Ler mais tots uns conceptes bilinguistes folklorics, comunistes pop com ho faría un amic. Molt recomanable! Potencia, energia i risc!
Borotau
19/04/2021
Opinião verificadaAssistiu em 18/04/2021
Provocació
Una proposta provocativa
Artaud
19/04/2021
Opinião verificadaAssistiu em 28/03/2021
Mensajes de una guerrera
Experiencia intensa que no para de chocar y sorprender. Una mujer potente con algo que decir. Estuve dos semanas después de la actuación pensando sobre ella, siempre descubriendo cosas nuevas en mi re Ler mais uerdo. Muy vivo. Muy fuerte. Un cañón. Vale mucho la pena.
Carlene
12/04/2021