Así es la estirpe de la que nace Alba Molina, los Molina (guitarristas) y los Montoya (cantaoras y bailaoras). Hija de dos iconos de la vanguardia flamenca, Lole y Manuel. La personalísima textura de su voz, su maravillosa afinación, sigue siendo un universo sonoro difícil de encasillar, tampoco es su pretensión como queda probado a lo largo de su trayectoria musical e incesante actividad artística.
Como broche final y tras los éxitos nacionales e internacionales cosechados con Alba Molina “Canta a Lole y Manuel” y “Caminando con Manuel” , Alba Molina acompañada a la guitarra por Joselito Acedo presenta el disco “Para Lole y Manuel”, una grabación de directo con temas inéditos como “Que nadie vaya a llorar”. Con este último disco cerrarán una gira que ya lleva 4 años presentando el delicioso repertorio de sus padres.
Alba Molina acaba de publicar un álbum titulado 'El Beso' en una época donde los besos están prohibidos. Al menos entre los no convivientes. «Es probablemente el disco más dulce que tengo. No por el momento presente, que es una tragedia, sino más bien porque yo me he dulcificado con los años. Será la edad», bromea la cantante.
Me considero bastante nostálgica y melancólica. Pero no lo veo como algo malo. Parece que hay que ser alegre todo el rato... Yo me identifico más con el otoño y con los días grises que con el sol. Me gusta la playa cuando no hay nadie, no con calorazo y ochenta millones de personas», remata con una carcajada.