La secta satánica Siervos del camino oscuro, mediante rituales satánicos han abierto una brecha al inframundo con el objetivo de traer a la tierra aquel al que llaman el único y verdadero Dios, el demonio conocido como Belial el profanador. Pero la brecha no es suficientemente grande para que Belial y sus huestes puedan atravesarla, por eso los Siervos del camino oscuro mediante la magia negra han poseído a miles de personas para poder conseguir los objetos que el profanador dejó en la tierra el día de su destierro a mano de los Hijos de la luz.
Ahora, 1500 años después de aquella batalla, los Hijos de la luz se ven obligados a volver a la lucha, reclutando a todo aquel que porte luz en su corazón. La única esperanza para que Belial y sus huestes no profanen todo aquello que conocemos, es ayudarlos a encontrar los objetos, que los Siervos de la oscuridad buscan y destruirlos para siempre.