Trabajo de los sentidos donde la ambientación, los sonidos, los gestos y el movimiento crearán una atmósfera placentera, un reducto de observación tranquila a un tiempo fuera del ritmo cotidiano. Por ello se plantea un trabajo gestual y coreográfico de gran precisión y sensibilidad así como una escucha enfocada a la interactuación con los pequeños espectadores, transportándoles a una atmósfera irreal y mágica que se desarrolla ante sus ojos a una distancia privilegiada, ofreciéndoles un punto de vista único a la par que se ven envueltos por una ambientación que contribuye a magnificar lo que se presenta ante sus ojos.